El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) afirmó el sábado que “no se ha registrado” por el momento ningún aumento en los niveles de radiación fuera de las tres instalaciones nucleares atacadas por Estados Unidos en suelo iraní en las últimas horas.
“Tras los ataques a tres instalaciones nucleares en Irán, incluida Fordo, el OIEA puede confirmar que, hasta el momento, no se ha registrado ningún aumento en los niveles de radiación fuera de las instalaciones” dijo el organismo en un comunicado publicado en X.
Noticias California 24/7 en Telemundo 20.
MIRA AQUÍ GRATIS “El OIEA proporcionará evaluaciones adicionales sobre la situación en Irán a medida que se disponga de más información”, indicó.
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SUSCRÍBETE Cómo se desarrolló la operación para atacar a Irán
Más de 125 aeronaves estadounidenses participaron en la misión que atacó tres instalaciones nucleares iraníes, según declaró este domingo en conferencia de prensa el general de la Fuerza Aérea Dan Caine, jefe del Estado Mayor Conjunto.
A los bombarderos furtivos B-2 se unieron cazas de cuarta y quinta generación y decenas de aviones cisterna de reabastecimiento en vuelo, explicó Caine, añadiendo que un completo despliegue de aeronaves de inteligencia, vigilancia y reconocimiento también se unió a la misión, lo que condujo a ataques contra las instalaciones nucleares de Fordo, Natanz e Isfahan.
Caine indicó que a la medianoche del viernes, un gran paquete de ataque B-2 compuesto por bombarderos despegó de Estados Unidos. Parte de este paquete se dirigió al oeste, hacia el Pacífico, como señuelo, añadió.
“El paquete de ataque principal, compuesto por siete bombarderos B-2 Spirit, cada uno con dos tripulantes, avanzó silenciosamente hacia el este, con comunicaciones mínimas durante las 18 horas de vuelo hasta la zona objetivo”, declaró Caine.
Continuación del desarrollo de la operación para atacar Irán
La operación fue bautizada Midnight Hammer (Martillo de Medianoche).
Una vez en tierra, los bombarderos reabastecieron de combustible antes de unirse a “aviones de escolta y apoyo en una maniobra compleja y de ritmo preciso que requirió una sincronización exacta”, explicó.
Justo antes de que los aviones entraran en el espacio aéreo iraní alrededor de las 5:00 p.m. ET, Caine indicó que un submarino estadounidense “lanzó más de dos docenas de misiles de crucero Tomahawk de ataque terrestre contra objetivos clave de infraestructura de superficie en Isfahan”.
También se emplearon varias tácticas de engaño, añadió, incluyendo aviones señuelo que avanzaban “frente al paquete de ataque a gran altitud y a gran velocidad”. Aproximadamente a las 2:10 a. m. hora local (6:40 p. m. ET), Caine indicó que el B-2 líder lanzó dos bombas penetradoras de artillería masiva GBU-57 sobre "el primero de varios puntos de mira en Fordo". En total, 14 de las bombas, conocidas como "rompebúnkeres", fueron lanzadas sobre dos objetivos nucleares, indicó.
Los tres objetivos de infraestructura nuclear iraní fueron alcanzados entre las 6:40 y las 7:05 p. m. ET, añadió.
Tras los ataques, Caine indicó que los bombarderos abandonaron el espacio aéreo iraní y emprendieron el regreso a casa.
El operativo, cuyo objetivo oficial era evitar que Irán obtenga un arma nuclear, alcanzó todos sus objetivos pero todavía es pronto para concluir si consiguió desmantelar el programa nuclear de la República Islámica.
